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sexos y fobias

La despensa

De culos y playas

En verano algunas orillas de playa parecen la calle Preciados en Navidad, claro que con disfraces cambiados; el gorro y la bufanda, por las gafas de sol y el pareo . En mi playa una marea humana pasea arriba y abajo a casi todas las horas del día. Unos caminan rápido, otros corren, los más pasean charlando, pero todos, todos, nos miramos hasta por el rabillo del ojo cuando nos cruzamos. Nos miramos los michelines, los vientres planos, las tetas bamboleantes, las grandes y pequeñas, los culos caídos y los respingones, las piernas largas o las morcillonas. Todos comparándonos, envidiando al cuerpo danone o alegrándonos por aquel que está peor que nosotros.




Los más mayorcitos paseamos miradas cargadas de deseo. He observado que cada vez se van incorporando más miradas con comentarios añadidos de mujeres maduras, sobretodo ante tipos como de anuncio Calvin Klein y se nos pone la misma carita que a ellos ante las veinteañeras. ¡¡Viva la paridad!!




Los rostros no importan; la mayoría vamos tapados con sombreros y gafas de sol. Es una gran feria de exposición de carne humana sin fines económicos.




En mi playa , que es una playa familiar , también se pasea el amor. Cuando son jóvenes lo pasean con mucha tetosterona y sin cortarse un pelo; nosotros aprendimos esto del coito viendo montar el perro a la perra mientras jugábamos en las calles, nuestros hijos lo aprenden en la playa alternándolo con los castillos de arena aunque al final acaban igual que nosotros contando cuentos de castillos, príncipes y princesas, sólo que con armas galácticas , princesas que bailan rock y todos con caras de chinos, que para eso los cuentos de hoy vienen del Japón.




En mi playa también se pasea el amor ciego, el de verdad, ese que te hace ir al lado de un culo gordo lleno de celulitis en ella y michelines en la cintura y barriga caida en él y tú ver en sus manos cogidas y en como conversan que para ella no hay cuerpo más amado que el de él y para él no hay culo más hermoso que ese que acaricia cada noche en su cama.


Medio muertos o medio vivos

La pregunta que cosas harías si te quedasen dos meses de vida me parece una solemne tontería. Pues qué se va hacer, seguir viviendo como hasta el momento o al menos intentarlo, porque no me van a decir que se disfruta igual con tamaña espada de Damocles encima, y hay que ser tonto para dejar hasta ese tramo final lo que no se ha hecho antes. Además ya lo dice el refrán: "En tiempos de crisis, no hacer mudanza"




Lo que no se me ocurriría es hacer una lista semejante a buscarle novia al marido para que le guste a las niñas, con lo puñeteras que somos las mujeres con la competencia. Más justo es dejar que se organicen ellos sin mí, que bastante me meto en sus vidas mientras estoy viva como para decidir sobre su futuro una vez muerta, para entonces ya no pintaré nada y mejor así, no vaya a ser que con el trauma que tengo encima, les deje un embolao. Tampoco se me ocurriría la putada de hacer que un chico se enamore para luego dejarle sufriendo por mi pérdida. Menudo egoismo. ¿Quién dice que porque te vayas a ir de este mundo sea decente embaucar con sentimientos, falsos o no, en cualquier caso sin posibilidad de futuro, a alguien?. Por esa regla de tres cualquier deshauciado puede matar por placer o por venganza, robar bancos o al vecino y escupirte a la cara si le apetece.




Si te dicen que te vas a morir a plazo fijo pues estate a morir, acabando lo que tenías entre manos y cerrando círculos, que una muerte digna no se improvisa y menos con prisas por hacer lo que no has hecho cuando estabas realmente saludable




Mientras estás viva es cuando, si te apetece unos huevos fritos con patatas y chistorra, cómetelos con ganas sin preocuparte de esos kilos y si te gusta a rabiar ese compañero que te tira los tejos, disfrútalo y sin amargar a tu pareja con los remordimientos de haberte comido ambos manjares. No esperes a tener una enfermedad incurable para hacer ese viaje con el que sueñas y ponte a conseguirlo, ya, que lo más probable es que cuando te anuncien la enfermedad incurable, te prohiban las grasa, no tengas fuerzas para viajar y ni mucho menos aspecto para enamorar




Cuando se ha tenido una vida plena y uno ha hecho lo que realmente le ha venido en gana, o casi, si te anuncian la muerte inminente, es jodido, pero mucho menos si te quedan pocas cosas pendientes. Es mejor vivir como si fueras a engrosar la lista de muertos en accidente de tráfico del próximo fin de semana, con fruición, con ilusión, con locura, besando y follando como si fuera la última vez. Y cuando salgas a la carretera hazlo con prudencia, que si no es este fin de semana, mejor para tí. Porque mientras no estemos muertos hay que estar a vivir y el amanecer de mañana puede ser espectacular. No te lo pierdas

¡Qué mona, la nieve!

Oye, pues recién levantada me hizo ilusión ver los jardines, tejados, farolas y coches de los vecinos todos blanquitos, blanquitos. Otra cosa fue hacerle cambiar al niño, en edad cabezota, de zapatos por unas botas más adecuadas. Tarde como íbamos al colegio tuve que hacer acopio zen para conducir a la velocidad y guardar las distancias recomendadas en estos casos. Continuaba nevando y al llegar al trabajo las zonas de aparcar estaban llenas de nieve por lo que mi coche derrapaba y derrapaba, así que tuve que buscar otro sitio con menos nieve y hacer con mis pies unos surcos que me facilitara dejar el coche.




Hacia el mediodia, mi hermana me llama para decirme que tiene una comida de trabajo y no hay manera de colocar al niño,(guarderia cerrada por la nieve, canguro missing y marido inoperante), salvo que la hermanita, o sea yo misma, se lo lleve a su casa a la hora de la comida. Total ,como me fuí a casa con el coche de mi hermana para no trasladar la sillita infantil, cuando llegué a la puerta de my home, después de un trayecto sin parar de nevar, me di cuenta que las llaves de la puerta estaban dentro del coche en el aparcamiento del curro. Vuelta al trabajo, con la misma nevada, el mismo niño y yo cada vez con más hambre.




Me fuí a hacer la compra a Carrefú, niño incluido, y allí me tomé un sandwich mientras empujaba el carro. Finalizada la cual me fui al aparcamiento para trasladar las bolsas de un coche a otro. Yo me protegía de la nevada como podía con las puertas de los maleteros mientras el niño berreaba porque le debía hacer ilusión lo de salir del coche y jugar con la nieve. A continuación dejé el niño en brazos de su madre y me reincorporé a mi trabajo vespertino. Como ya tenía hecho Carrefú, a la salida, me fuí a la pescadería de mi pueblo y entre otros animalitos compré las huevas de algún pescado para freirlas el sábado y completar así una cena sevillanísima que estoy preparando. Yo no sé si os habéis percatado que las aceras de las pescaderías suelen estar mojadas de lo que chorrean los pescaditos, y en días como hoy, además, medio embarradas y heladas. ¡Cómo no me iba a pasar a mí con el día que llevaba!. Me resbalé, se me partio la bolsa y las huevas rodaron. Unos gamberretes que paraban en el bar de enfrentre se rieron y les oí decir: mira a esa se le han caído los consoladores.¡Prohibido reírse, solo admito una sonrisilla de conmiseración!




Y es que la nieve trastorna mucho, si no que se lo digan a los del Valle de Arán, que de tanta nieve y andar como pingüinos todo el día, se les ha balanceado demasiado el cerebro y sólo se les ha ocurrido pedir tratado de libre adhesión a lo Ibarretxe con Cataluña




“El Conselh Generau d'Aran, parlamento autónomo del Valle de Arán, ha aprobado hoy por unanimidad un documento en el que solicita que el nuevo Estatut de la comunidad catalana establezca un "pacto de libre unión" de este "territorio autónomo" con Cataluña. “

Pero ésta es otra historia más para llorar

Vida social de las plantas

No es lo mismo un coche fúnebre con 4 coronas de flores colgadas, que seguido además, por 20 coronas a pié. Entierros con coronas de a pié se ven pocos, la verdad. Una corona de a pié sabe que adorna el entierro de un gran personaje, la corona colgada en el coche sólo se entera de su importancia si oye a una capilla musical.




En las bodas también hay un derroche de flores, y ello es para que los novios se enteren que están asistiendo al entierro de su propio amor y que el único camino de rosas que se van a encontrar en su vida es el camino al altar, después sólo alguna que otra flor en el nacimiento de los hijos y algún ramo baratito el día de los enamorados. Se impone la mentalidad práctica, y el marido, conociendo tu afición a las plantas te regala macetitas para que duren más.




Para prestancia, las plantas de los bancos o grandes instituciones, tal parece que te quieren acojonar ya desde el vestíbulo con elevadas vegetaciones de raras especies que tú intuyes carísimas y que observas siempre brillantes y lustrosas como el color del dinero que allí se maneja. La imagen del poder de un banco o de una institución son las inmensas plantas de los vestíbulos y sus cuadros siempre en gran formato. Yo siempre pienso que cuando un banquero te invita a comer pide una botella de vino mágnum.






Por más pequeños que sean lo ramitos de las mesas de los restaurantes siempre acaban estorbando y tienen que ser retirados, aunque ya han cumplido su función social. Si el restaurante es caro, las flores son naturales, si es de medio pelo las flores son de tela y si es una tasca barata de barrio, las flores o plantas son de plástico y están colgadas por las paredes. Ojo, el tipo de flores nada tiene que ver con la calidad de la comida sino con el precio de la factura.




También hay plantas en los vestíbulos de los hospitales y no sólo nos muestran las diferencias entre la sanidad pública y privada; en líneas generales, la Sanidad Privada se gasta más dinero en plantas, vistas, y cuadritos que en equipos técnicos. Aunque si quieres salvarte, olvídate de las macetas y vete a la Sanidad Pública. La Pública sólo tiene una cuantas jardineras sufridas en el vestíbulo para contrarrestar de algún modo la asepsia , los olores y el dolor que encierra en sus entrañas.




Hoy en día hay unas flores que están cobrando una importancia emergente e imparable; no se marchitan, no mueren, se pueden enviar a cualquier lugar del mundo e inmediatamente, son perfectas, no cuestan dinero, con lo cual lo único que hay que tener es sensibilidad. Se puede decir que se están imponiendo socialmente, por el momento, entre enamorados. Tienen la pega que no huelen, claro que las flores de invernadero tampoco tienen olor. Y es que internet se ha convertido en la mayor floristería del mundo. ¿Hay alguien que no haya recibido una ciberflor aún?

Distraidos al volante

Dicen que el fumar en los coches distrae y es causa de accidentes. Dicen que por ahora sólo harán campaña para recomendar una conducción sin tabaco; después, ya veremos, y lo que veremos es a la Guardia Civil parando coches y oliéndonos el aliento. En caso de que nuestro hálito arroje a la autoridad aromas de tabaco, multa al canto.


Para entonces ya no beberemos, no fumaremos, no hablaremos por el móvil y, ¿cuándo nos prohibirán hablar con el cónyuge?. Para mí, no sólo es causa de distracción, sino hasta de crispación. ¿Hay algo más peligroso que una persona alterada al volante?. Yo abogo porque también prohiban hablar con el copiloto y por supuesto tampoco podrán hablar los pasajeros entre ellos ya que no hay nada más frustrante que escuchar conversaciones y no poder intervenir.


¿Y quién dice que escuchar la radio no distrae, altera e indigna? Dependerá del programa, claro, pues no es lo mismo ser de Extremadura e ir por la autopista a la altura de Navalmoral de la Mata camino del pueblo para pasar unas vacaciones, con las de kilómetros que ya se lleva en el cuerpo desde San Sebastián o desde Sabadell, y escuchar al señor Rovira o al señor Ibarretxe decir que los que no sean nacionalistas serán tratados como ciudadanos de segunda en ambas ”naciones”, con la de años que llevas currando en ellas. Y si vas escuchando música romántica y te acuerdas de lo que no debes, no sólo es que te distraes, sino que te transportas, mientras el coche solo sigue su rumbo a 140 Km/h. Luego, lo más práctico, es que los coches vengan con un aparato que únicamente reproduzca música ambiente, de esas que ponen en salas de espera y que nadie escucha, pero acompaña.


Y los niños, ¿Qué hacemos con los niños?¿Los drogamos? ¿Quién no ha estado a punto de matarse mientras las criaturitas, detrás, no paraban de chillar y pelearse? ¿A quién no se le ha ocurrido asesinar a las fieras de los niños después de 3 horas de gritos y broncas dentro de un coche?. El letrero ¡Cuidado Bebé a bordo! debería decir ¡Cuidado, carga peligrosa a bordo! y ya, los demás conductores cuidaríamos con una prudente distancia al vehículo conducido por un, ya, energúmeno fuera de sí.


Ante tantas causas de distracción, por supuesto no mencionadas todas aquí, la Dirección General de Tráfico nos acabará obligando a ir en tren, las carreteras sufrirán poco deterioro, no habrá que construir nuevas vías y el índice de accidentes se habrá reducido exclusivamente a unos cuantos camioneros que pasarán a engrosar las listas de accidentes laborales

Mi primera Cerdanya

Hay una imagen de la que no me ha hecho falta tomar ninguna foto, tan clavada la tengo. Cada mañana bajando de La Molina, al acercarnos a Puigcerdá para, desde allí, emprender camino a cualquier parte, ahí estaba, delante, cual dama madura sosegada, aposentada en una ancha loma, levemente iluminada por un sol sin aristas, suavemente velada por un ligera bruma , protegida sus espaldas por un Pirineo gastado y alfombrada en derredor por campos dorados y verdes; llanuras onduladas como un mar apacible. Si entrabas en ella, se repetía por sus calles la misma suavidad y dulzura, acompañándote el olor de una coca humeante de chocolate desbordado. Qué tentación de meter el dedo y chuparlo mientras levantas los ojos para contemplar la torre de la plaza.




Y el sonido del agua de lagos, torrenteras, rios, cascadas por aquí y por allá que te va acompañando en todo el deambular por la comarca . Hasta que arriba de la montaña de Maranges encuentras el Malniu, lago frio que corona el monte, y es allí donde, por primera vez en tu vida, decides bañarte desnuda a pesar de ojos lejanos, para envolverte así de la madre de todas las aguas que has ido deseando.




Y ya ,para entonces, los pueblos no son damas sino piedras vivas que han emergido de su montaña y ves pueblos encaramados como cabras de colores pardo, de colores rojo hierro, de colores negro . Pueblos de difícil acceso, heroicos de habitar, sólo bellísimos para contemplar de lejos. Pirineo suave, Pirineo angosto, Pirineo sobrecogedor, Pirineo abierto hasta las cachas mostrándose desvergonzado y obsceno en sus profundidades verdes y húmedas.




Y siempre volviendo al bálsamo de la llanura y contemplar el Pirineo cercano y ese velo permanente que todo lo suaviza, incluso el ánimo. Si el seny catalán tuviera una imagen, ésta sería La Cerdanya cada mañana